El tiempo natural es cíclico. El tiempo es la atmósfera de la mente. La calidad de tu tiempo será la calidad de tu mente. El calendario maya es un sincronizador para alinear nuestra mente y nuestro tiempo desordenados, al tiempo natural, al tiempo del cosmos, de la vida, de la Divinidad. O dicho sea de otra forma, al no-tiempo.

24 de julio de 2020

Nuevo año 2 Cauac, Tormenta lunar azul: El desafío es la auto-generación

2020. El año de la cuarentena, del covid, de la pandemia mundial. Dos veces el Ahau, el sello 20. Doble Ahau, doble sol, dos veces el arquetipo del Sacerdote. 
En este calendario la segunda mitad del 2019 y la primera del 2020, son el mismo: 1 Ix o Mago magnético blanco, el kin 14 de 260, el primer Mago del Tzolkin, llega con su mensaje simple y certero: Atemporalidad: el poder del presente, sus características e importancia para el crecimiento personal y colectivo.
Este año del Mago termina y viene bien hacernos un ejercicio de recordar todo lo que vivimos porque ha sido en este año que verdaderamente estamos compartiendo una experiencia en total colectividad, nivel Gaia: Planeta Tierra. 

Hayamos querido o no, la enseñanza del Mago ha estado activa y nos hemos visto obligados a vernos a nosotros mismos, tal y como somos, en ciertas circunstancias: todos tenemos el mismo tema en común,  algo que nos une, que nos atrae, que nos concentra, he ahí la energía del tono 1 magnético.
Ya se ha dicho mucho al respecto, y queremos ocuparnos de lo que viene a continuación, que será nuestro presente en cuestión de días, o sea, ¿ya? ¡sí! ¡YA!
Hoy, al 24 de julio de 2020: 
- Estamos cerrando los 13 días de la onda encantada de la Serpiente roja
- Estamos en el último de 28 días de la luna (o mes) 13 de las 13 lunas (o meses) del calendario 13 lunas de 28 días
Mañana, 25 de julio es el "Día fuera del tiempo", el que marca el final del año 1 Mago y el inicio del siguiente año de 13 lunas de 28 días a partir del 26 de julio.
Este siguiente año es un año 2 Tormenta, si el Mago nos trae al presente, la Tormenta nos inyecta de energía para el cambio. ¿Has visto tu presente? este confinamiento o alteración de rutinas, si es que no has tenido encierro, ¿te ha mostrado cómo es tu vida en este momento? Bueno pues la fórmula es simple: esto que has vivido es resultado de algo que tú has hecho, y un poco en el coctel tiene que ver factores externos, sin embargo lo que nos ocupa es el hecho de que nos hemos contemplado y una de las maravillas del presente es reconocer que lo que elija hoy, tendrá entonces cierta consecuencia en el futuro, no sabemos cuándo ni cómo, es de instantes de presencia que vamos construyendo la vida que proyectamos. Todas aquellas cosas que estamos descubriendo sobre nosotros mismos en estos momentos simplemente nos muestran lo que hay, lo que hemos fabricado. Y de todo lo que no te gusta cuando lo ves, ¿puedes cambiarlo? si tu respuesta es sí, ¿qué necesitas para hacerlo?; si tu respuesta es no, entonces, ¿puedes soltarlo? o quizá, ¿puedes cambiar tu actitud al respecto? 
Tras este enfrentamiento con la realidad, el Mago nos conduce a territorios de Cauac, la Tormenta azul: Energía que cataliza para auto-generar. Transformación, transmutación, cambio, movimiento. Es el elemento que a veces hace falta para que toda la maquinaria se eche a andar.
El tono 2 de este año, el tono lunar del desafío. Porque cada propósito tiene un reto, en este caso el propósito lo marca el Mago en el tono 1 y a continuación el sello de la Tormenta nos indica cuál será el desafío: re-inventarnos o quizá sólo ser nosotros mismos. Quizá esa re-invención o auto-generación sólo signifique dejar de ser eso que no somos y con lo que nos hemos identificado, le hemos generado apego a lo que no somos en realidad: seres que sienten.
El Mago dice que en el presente se activa la receptividad y yo creo que sucede justo al permitirnos sentir. Le hemos dado demasiado valor al pensar y ninguno al sentir. Ahora podemos utilizar el pensamiento a favor tan sólo para poder reconocer lo que sentimos: qué siente el cuerpo, qué habita ahí, además de cierta sensación, qué emoción nos atraviesa a cada instante. No es lo máximo tener la capacidad de pensamiento, sino contar con las dos cualidades: Pensamiento y emoción. Ahí, en el presente cuando nos permitimos sentir entonces podemos saber qué pasa con nosotros mismos y desde este instante entonces ir creando lo que sí nos gusta y necesitamos y dejar de perpetuar lo que no nos sirve más. 
El ejercicio es simple: Respira profundo y pregúntate qué sensación tiene tu cuerpo en este momento. A continuación pregúntate qué emoción está asociada a esa sensación en dicha parte del cuerpo, entonces permites sentir eso, lo que sea (puede ser que no podamos ponerle nombre incluso). Sientes y ya, eso es lo que sientes y está bien. Y si no se siente bien, lo cual también es posible, lo que sigue es buscar más, qué más se siente, qué me cuenta el pensamiento. Y desde un lugar de conciencia, desde el lugar que estamos observando, ser cordiales con lo que vemos, lo cual, en la mayoría de los casos, será infancias heridas.
Así que esta es la oportunidad de auto-generarnos: sacar todos los trapos sucios porque la Tormenta nos va a ayudar a lavarlos. Reconozco lo que hay en mi presente (Mago) y procedo a hacer los cambios necesarios para que ese presente sea lo que yo quiero vivir (Tormenta).
Y para hacer pausa entre años tenemos el DFT o día fuera del tiempo que en esta ocasión será 1 Etznab o Espejo magnético blanco: Atraer el reflejo para apreciar el orden. Hay un orden superior, la vida se organiza en todos los niveles, y aquí donde cada quien está, puede contribuir alineándose o no. Ya el 1 Mago nos mostró, y el 1 Espejo como cierre de ese año nos invita a mirarnos en otros para poder vernos a nosotros mismos y ese orden implícito en todo lo que está vivo, para entonces continuar hacia crear esa vida que queremos experimentar, yendo más allá de todas las limitaciones que hemos además, contribuido a perpetuar.
Que todo ciclo te lleve hacia tu más alto bien.







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