Recorremos el Castillo blanco, dirección norte, refinar, purificar, meditar... Las Ondas encantadas que lo componen son las del Caminante del cielo rojo, el Enlazador de mundos blanco, la Tormenta azul y el Humano amarillo. En resumen, es algo más o menos así: Exploramos el espacio que ocupamos y el camino que recorremos para reconocer que vivimos con base en ciclos y que el soltar y dejar ir son acciones constantes para poder ir tras oportunidades cada vez más elevadas, en vías de reciclar siempre la energía de vida que nos compone, de elevarla a su vez, retirando piel vieja y regenerándonos, tomando decisiones, eligiendo el siguiente camino a recorrer, equivocándonos, influenciando a otros y dejándonos influenciar, como buenos seres humanos... Este Castillo trata mucho sobre la limpieza de lo que nos damos a nosotros mismos y a nuestros espacios y a no dejarnos estacionados o detenidos en ningún lugar, en ningún momento. El paso seguro, a veces lento a veces cuántico, a veces muy veloz, pero que no pare.
Esta OE de la Tormenta en particular nos lleva de atraer los elementos necesarios
para auto-generar nuestra energía hasta trascender las ilusiones por
medio de nuestros dones y magias. Cuestiones como el poder de
manifestación del pensamiento, creer y crear, las sincronías cada vez
más presentes, etc., son la clara muestra de que algo está sucediendo,
algo revolucionador, acelerador, catalizador, o sea, la Tormenta en sí.
Por eso esta OE llega justo después del Enlazador de mundos, porque
necesitamos soltar y desprendernos por las buenas y por voluntad propia
para poder comenzar la revolución interior. Si no soltamos, las cosas
que nos estorban nos van a estar chocando y entorpeciendo el camino
mientras se sueltan por sí mismas. Y no hay necesidad de más obstáculos.
A veces la
Tormenta es necesaria para darnos cuenta de aquello que no hemos mirado, para cambiar algo en nuestras vidas y,
si ya nos dimos cuenta y ya hemos accionado un cambio, pues para
darnos cuenta de más cosas, seguir cambiando y sobre todo, me parece,
ser más amorosos, vivir más desde el corazón abrazando todo lo que nos
llega y también lo que se va.
Así que siguen los
tiempos de cambio, de cambio verdadero, profundo, intenso y del que no
pide permiso. Acompaña este panorama la luna llena en Aries, con todo y eclipse, tiempos de Sol en Libra, donde revisamos nuestras relaciones y aprendemos que no se trata sólo de uno mismo, sino de todas las implicaciones que tiene el "nosotros". La auto-generación de la que habla la Tormenta en esta ocasión tiene que ver un poco con desarmar el ego para ceder al corazón y desde ahí, dejar de compararnos o de juzgar a los demás y comenzar a abrazarlos. La elección de vivir como hermanos humanos (Siguiente OE del Humano) está en cada uno de nosotros y en soltar de una vez el drama de los corazones rotos (¿El de quién no?). Estamos transitando la luna eléctrica del servicio, lo que reafirma esta idea del "nosotros", servir a los demás debería ser parte de nuestra agenda. Participar aportando nuestro don personal y desde el corazón, es el servicio más elevado que podemos compartir. Y por si fuera poco, Mercurio retrógrado cual cereza en el pastel! Reafirmando que los demás son el espejo y los maestros, bajar la guardia y no tomarse nada personal, retos de esta OE.
Tormenta magnética azul (4 oct), Atrae lo que te ayudará a auto-generarte. Concentra e irradia tu
energía vital, cataliza la auto-generación de los demás siendo un canal
para el amor.
Sol lunar amarillo (5 oct), Utiliza tu luz
interior para estabilizarte, polariza con tu fuego interno lo que ha de
brillar y lo que ha de purificarse, honra la vida.
Dragón eléctrico rojo
(6 oct), Activa la nutrición, vincúlate con personas y actividades que
alimenten al Ser interior. Permite la Tormenta que rejuvenece, limpia y
resuelve.
Viento auto-existente blanco (7 oct), Dale
forma a la comunicación, que regenere, que revitalice, que desbloquee.
Inhala una nueva forma de ser, exhala los viejos patrones.
Noche entonada azul (8 oct), Empodera tu intuición, sueña con abundancia para ti y para toda la comunidad. Escucha la voz de la Tormenta.
Semilla rítmica amarilla
(9 oct), Organiza tu propio florecimiento. Espera y sé paciente, pon
atención en aquello que te resuena, deja que la Tormenta se tome su
tiempo mientras, cual Semilla, esperas el momento de salir a brillar.
Serpiente resonante roja
(10 oct), Escucha tu cuerpo, descarga hacia la Tierra y elévate al
Cielo. Vuelve a honrar tu vida. Canaliza la Tormenta haciendo alguna
actividad sanadora con el cuerpo, baila, medita, muévete un poco.
Enlazador de mundos galáctico blanco
(11 oct), Siguiente oportunidad de soltar, dejar morir y romper con
aquello que ya no funciona más en tu vida. Integra a tu cotidiano la
capacidad de soltar fácilmente.
Mano solar azul (12 oct), Expande tu conocimiento
sanador. Cree en el poder de tus manos, sólo basta la intención clara
conectada al corazón para sanarte.
Estrella planetaria amarilla
(13 oct), Manifiesta tu arte personal. Cree en tus dones, deja que la
Tormenta te saque brillo. Perfecciona tu apreciación de ti mism@.
Luna espectral roja (14 oct), Fluye, sigue liberando a través de tu emoción. Deja que se derramen sobre ti las emociones más elevadas.
Perro cristal blanco (15 oct), Ama tu comunidad. Prefiere compartir a juzgar, deja que todas tus relaciones pasen por el filtro de tu corazón.
Mono cósmico azul
(16 oct
), Juega el juego bajo sus reglas: Todo es una ilusión y por lo
tanto, todo es posible. Trasciende el drama, las emociones densas y los
pensamientos destructivos por medio de creer en tu magia personal.
A
desatormentarnos! Que esta Tormenta nos deje dosis abundantes de calma y
sosiego interior, que perdure la paz del corazón en cada uno de
nosotros.
Buen viaje herman@s!
In Laak'ech
Monique
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